18/9/08


Te regalo un camino de tropiezos y una mano fuerte en tu hombro para cuando quieras caerte conmigo. Te regalo la multitud de soledades que te precedieron para que construyamos nuestros propios días de sol. Te regalo una cadena de errores para que compartamos culpas, dividamos penas, suprimamos castigos. Te regalo la certeza de que siempre se vuelve al principio, principio y fin de todo este andar. Te regalo los resabios de este corazón, hecho y deshecho y vuelto a armar que encuentra en los huecos del tuyo el ensamble más perfecto. Te regalo la infinitud de las palabras tiernas que no me sale decirte pero que pugnan por escapar del pecho. Te regalo las canciones que no escribí ni voy a escribirte aunque sepas que te pertenecen por completo. Te regalo un sin fin de verdades dolorosas y punzantes que todavía no alcanzo a contarte. Te regalo un cuerpo, común y corriente que se sabe imperfecto, pero aún así está deseoso de tenerte. Te regalo en suma este puñado de pequeñeces, lágrimas y flores que es mi vida para que en ella dibujes tu silueta, su divino complemento y empecemos a caminar.

No hay comentarios: